Alaric McCabe siempre ha estado dispuesto a sacrificarse para defender los derechos de los suyos; por ese motivo ha aceptado desposarse con la hija del laird del clan vecino. Pero cuando se dirige hacia las tierras de su prometida, Alaric y sus hombres caen en una emboscada y son dados por muertos.
Keeley McDonald fue traicionada por personas de su máxima confianza y desde entonces vive apartada de sus seres queridos. Cuando Alaric se desploma herido delante de su casa, ella acude en su auxilio y promete cuidarlo hasta que se recupere, sin pensar que su ofrecimiento pondrá a prueba su capacidad para resistirse al deseo que el guerrero escocés le provoca.